EL SÍNDROME DEL NIÑO RATA

“Asi que putéame pinche niño rata, resquebraja mis tímpanos con tus quejas, aquellas que viajan  con una punzante y aguda voz.”

En este caso se trata de un ser de 2 patas, definido por varios como criaturas cuya madriguera viene a ser su recámara, de la cual rara vez salen, su alimentación por excelencia son los videos de  youtubers.

Unos nombran un síntoma de los niños rata, el cual es el  dedicarse a criticar porque sí y atacar a diestra y siniestra viendo solo los titulares y nombres de posts o videos. Te destrozan los tímpanos con sus funestas voces. Otros se dice que tienen un modus operandi en el que crean perfiles falsos para entrar a sus redes sociales y dejan comentarios con una ortografía terrible, quemando tus retinas y luego se desaparecen.

Es algo cómico y a la vez tenebroso saber que cada vez hay más chic@s así, se reproducen en mayor cantidad. Hoy en día se ve en toda red social a alguno de éstos que se la pasan tomándose los comentarios personalmente y luego putean a quien sea. Sólo ciertos días a la semana parece que se arman de valor y tratan de no dejarse afectar por el qué dirán, salen de su cloaca(su habitación) para buscar reproducirse con una jovenzuela, usando el disfraz de galán, cuando en realidad ellas no saben que en el fondo hay un tóxico ser. Igual, tarde o temprano son delatados por sus propios comportamientos,por su chillona voz ,por el bajo volumen de ésta, y por sus perfiles sociales en el cual se ve a un creepy y a veces solitario roedor.

Pero no todo es malo, hay mucha comicidad, sin ellos no habrían varios memes o videos, los cuales nos sacan una que otra sonrisa. Sin su existencia tampoco se podrían aprovechar los “gurúes” que prometen sacarlos de su inmundicia para hacer algo de dinero.

Depende de cada uno no dejar que varios de estos síntomas se apodere de nosotros. Queremos ser criaturas que se las pasan en una obscura habitación, detrás de una pantalla buscando lo malo en todo?, o buscaremos ser entes de bien para evitar que más gente caiga bajo este y otros enfermizos síndromes que aquejan a al prójimo?

Dejemos de ser chillones y quejumbrosos y aportemos en algo benévolo para el bien de todos.

               

     

Así que putéame pinche niño rata, resquebraja mis tímpanos con tus quejas, aquellas que viajan  con una punzante y aguda voz.

Arroja tus tóxicos comentarios llenos de hostilidad, ya que si alguien respondiere con odio, ese no seré yo. En la aversión encontraré el humor y la gracia. Después de todo, que seríamos sin ti, sin tus ponzoñosas mordidas hacia los demás. Mientras unos se ofenden, otros veremos la belleza en lo malo, transmutaré lo tóxico en ventura.

Aunque tu reino son las cloacas disfrazadas de una recamara, y tu espada un teclado, sé que pronto pasarás de ser un atroz rastrero, a ser un pacífico ser atiborrado de vida que sale a la luz del día